Venice, California, 12-7-95
Queridas hermanitas:
Por Vladimir Huber
Queridas hermanitas:
Tiempos de años pasados con dolores presentes
Sueños de dulces despertares con alegrías pasadas
Renaceres de errores cometidos con dolores ajenos
Perdones soñados y pedidos del ayer para el hoy
Palabras lanzadas al viento en un cálido verano
Sentimientos de dolor que llevo en el alma
Emociones de agonía en el espíritu por el dolor causado
Me tiendo a vuestros pies pidiendo merced, compasión, perdón
Juicios emitidos desde los altos lugares
En que mis sentimientos de inferioridad me pusieron
Me llevaron a enjuiciarlas una y otra vez
Tratando buscar a quien pisotear
Para que mi pequeñez no me fuera evidente
Ya fuera una licencia para manejar, ¡qué cosa!
O una cancha de tenis en casa, ¡habráse visto!
Mi creatividad no tenía límites
En mi búsqueda de cosas para criticar
Máscaras llevé y llevo en mi andar taciturno y alegre
Adornos y destellos de mil caras con mil canciones
Así como ando el camino y canto los cantos
Voy viendo las caras y no son todas las que me gustan
De las mil escojo unas pocas y quizás una sea la que baste
Así como voy afirmando mi andar en un camino ancestral
Surgen dolores del recuerdo de años pasados
En el pretender de que era lo que no era
Aparte de perdón, les pido fuerzas y amor
Aparte de cariño, les ofrezco mi amor
Sentimientos y emociones abrazándose en un mar eterno
Sentires y cantares pidiendo un respiro en un andar jadeante
Abrazos y sonrisas yacen a la vera del camino
Esperanzas de días soleados en lugares milenarios
Sueños de andares alegres junto al río eterno
Me llevan a abrazarlas en un canto de amor y paz
Lágrimas de gozo y perdón me surgen y lavan el dolor
Lágrimas de cantos de unidad me llevan a la mar
Sonrisas de seres lejanos me tocan a la puerta
Lo que traen es la esperanza que creía perdida
Y que sólo estaba a la vuelta de la esquina
Hermanitas queridas, las veo en sueños elevarse
Las veo en canciones alegrarse junto a mí y a todos
Las veo sanando el dolor que han encontrado en la vida
Las veo cantando y bailando al son de la vida
Les envío estas líneas, escribiendo con el corazón
Algo que había olvidado hacer por una buena parte de mi vida
Recobro el andar perdido para extenderles mi mano
Pidiéndoles el cariño que por tantos años no les supe dar
Hermanitas queridas, les pido perdón
Vuestro hermano que las quiere
Mucho más de lo que ha tenido el valor de expresar,
Vladimir